El Wienerbrød es un pastel típico de Dinamarca, conocido por su forma característica de una espiral enrollada. Su origen se remonta a la década de 1850, cuando los pasteleros austriacos emigraron a Dinamarca e introdujeron este dulce en el país.
La preparación del Wienerbrød implica la elaboración de una masa de hojaldre con mantequilla y harina, la cual se enrolla con un relleno de crema pastelera o frutas.
Se suele comer en el desayuno o en la merienda, y se sirve acompañado de mantequilla y mermelada. El sabor es dulce y crocante, debido a la masa de hojaldre y el relleno de crema pastelera o frutas.